JVM en el debate: la desesperación ante el rezago
GUADALAJARA, Jal.-Josefina Vázquez Mota jugó, en el debate de este domingo, todo su capital para salir del rezago ante Enrique Peña Nieto y Andrés Manuel López Obrador, a quienes definió como dos rostros del PRI, y se trenzó con Gabriel Quadri, quien la exhibió por llamar a Elba Esther Gordillo "querida amiga".
Empeñada en buscar todos los votos posibles, la candidata del PAN fue la única que debatió con Quadri, candidato de Nueva Alianza: "Cada voto por usted es un voto para una familia, la familia de Elba Esther Gordillo".
Unica mujer en la contienda, fue también la más rijosa. Acusó a Peña Nieto de auspiciar el espionaje como gobernador, su relaciones con los exgobernadotes Tomás Yarrington y Humberto Moreira, de obstruir las reformas y de rehuir a los jóvenes, como en la Universidad Iberoamericana, donde, le subrayó, se encerró en un baño.
Y a López Obrador lo atacó por su pasado priista, sus relación con Manuel Bartlett, la corrupción que hubo en su gobierno y en sus propuestas para hacer crecer a México.
"No le salen las cuentas", le dijo Vázquez Mota el perredista, a quien le imputó que hubiera militado en el PRI en 1971, cuando se realizó la matanza de estudiantes.
Más aún, le pidió explicar a los jóvenes que convocó a la Plaza de las Tres Culturas de Tlatelolco, el 21 de mayo, por qué no renunció al PRI por la matanza de 1968.
Y fue a ella a la que no le salieron las cuentas, como se lo hizo ver López Obrador, porque en el 68 tenía 15 años de edad y 18 cuando el Jueves de Corpus.
Con la máxima de que no hay más ruta que la suya, Vázquez Mota se proclamó ganadora del debate.
"Así como ganamos este debate ganaremos la presidencia de la República", afirmó en el mensaje que emitió tras el ejercicio celebrado en la Expo Guadalajara.
Con base en la consulta que hicieron los diarios del Grupo Reforma, la candidata de la derecha aseguró que hizo un llamado a la "izquierda moderna" y a los priistas que no están de acuerdo con la corrupción a votar por ello, lo mismo que a los indecisos.
"Soy su opción de estabilidad", proclamó y ofreció un gobierno de coalición.
"Estamos felices, ganamos el debate", insistió y luego mostrô la palma de la mano izquierda donde anotó una cruz.
"Que esta sea nuestra señal de la victoria", dijo al invitar que hicieran lo mismo otros panistas como Gustavo Madero, presidente del PAN, y Fernando Guzmán Pérez Peláez, candidato a gobernador.
Sin embargo, el triunfalismo de Vázquez Mota se estrelló con una realidad en Guadalajara: El festejo por el supuesto triunfo en el debate fue muy deslucido.
Pese a que el PAN cerró desde la mañana el puente atirantado Matute Remus, lo que generó serios problemas viales en la zona, y se colocaron vallas a lo largo de 2 kilómetros, no llegó ni la mitad de los panistas que se esperaba.
A la hora en que llegó la candidata, casi a las 23:30 horas, había una escasa asistencia.
Uno de los dos escenarios que se montaron no se usó y los puestos de antojitos no tuvieron venta.
Fue un acto tan poco concurrido como el de ayer con deportistas y que refleja la severa crisis del panismo jalisciense, que está respaldando al carismático candidato del Movimiento Ciudadano, Enrique Alfaro, quien esta noche celebró con López Obrador.
Antes de iniciar el debate, Vázquez Mota y el PAN sufrieron un revés en su estrategia de guerra sucia diseñada por incondicionales de Felipe Calderón: El Instituto Federal Electoral (IFE) suspendió los spots que manipulan un fragmento del discurso de López Obrador.
Mañana, la candidata del PAN se dedicará todo el día a dar entrevistas para enviar el mensaje de que ella ganó el debate en su estrategia por conquistar el voto de los indecisos.
Por la noche, a las 19 horas, encabezará un mitin en Lagos de Moreno, en la región de Los Altos, camino hacia Aguascalientes, donde el martes hará campaña.
La panista fue acompañada en el debate por 26 invitados especiales, entre ellos su esposo Sergio Ocampo, y sus tres hijas, así como Margarita Zavala, la consorte de Calderón y quien inclusive la acompañó ayer en el avión de la Ciudad de México a Guadalajara, en lo que fue el segundo vuelo comercial en la campaña.
La panista llegó a la capital jalisciense desde el viernes y el sábado y parte del domingo ensayó sus intervenciones con sus colaboradores.(apro)
Empeñada en buscar todos los votos posibles, la candidata del PAN fue la única que debatió con Quadri, candidato de Nueva Alianza: "Cada voto por usted es un voto para una familia, la familia de Elba Esther Gordillo".
Unica mujer en la contienda, fue también la más rijosa. Acusó a Peña Nieto de auspiciar el espionaje como gobernador, su relaciones con los exgobernadotes Tomás Yarrington y Humberto Moreira, de obstruir las reformas y de rehuir a los jóvenes, como en la Universidad Iberoamericana, donde, le subrayó, se encerró en un baño.
Y a López Obrador lo atacó por su pasado priista, sus relación con Manuel Bartlett, la corrupción que hubo en su gobierno y en sus propuestas para hacer crecer a México.
"No le salen las cuentas", le dijo Vázquez Mota el perredista, a quien le imputó que hubiera militado en el PRI en 1971, cuando se realizó la matanza de estudiantes.
Más aún, le pidió explicar a los jóvenes que convocó a la Plaza de las Tres Culturas de Tlatelolco, el 21 de mayo, por qué no renunció al PRI por la matanza de 1968.
Y fue a ella a la que no le salieron las cuentas, como se lo hizo ver López Obrador, porque en el 68 tenía 15 años de edad y 18 cuando el Jueves de Corpus.
Con la máxima de que no hay más ruta que la suya, Vázquez Mota se proclamó ganadora del debate.
"Así como ganamos este debate ganaremos la presidencia de la República", afirmó en el mensaje que emitió tras el ejercicio celebrado en la Expo Guadalajara.
Con base en la consulta que hicieron los diarios del Grupo Reforma, la candidata de la derecha aseguró que hizo un llamado a la "izquierda moderna" y a los priistas que no están de acuerdo con la corrupción a votar por ello, lo mismo que a los indecisos.
"Soy su opción de estabilidad", proclamó y ofreció un gobierno de coalición.
"Estamos felices, ganamos el debate", insistió y luego mostrô la palma de la mano izquierda donde anotó una cruz.
"Que esta sea nuestra señal de la victoria", dijo al invitar que hicieran lo mismo otros panistas como Gustavo Madero, presidente del PAN, y Fernando Guzmán Pérez Peláez, candidato a gobernador.
Sin embargo, el triunfalismo de Vázquez Mota se estrelló con una realidad en Guadalajara: El festejo por el supuesto triunfo en el debate fue muy deslucido.
Pese a que el PAN cerró desde la mañana el puente atirantado Matute Remus, lo que generó serios problemas viales en la zona, y se colocaron vallas a lo largo de 2 kilómetros, no llegó ni la mitad de los panistas que se esperaba.
A la hora en que llegó la candidata, casi a las 23:30 horas, había una escasa asistencia.
Uno de los dos escenarios que se montaron no se usó y los puestos de antojitos no tuvieron venta.
Fue un acto tan poco concurrido como el de ayer con deportistas y que refleja la severa crisis del panismo jalisciense, que está respaldando al carismático candidato del Movimiento Ciudadano, Enrique Alfaro, quien esta noche celebró con López Obrador.
Antes de iniciar el debate, Vázquez Mota y el PAN sufrieron un revés en su estrategia de guerra sucia diseñada por incondicionales de Felipe Calderón: El Instituto Federal Electoral (IFE) suspendió los spots que manipulan un fragmento del discurso de López Obrador.
Mañana, la candidata del PAN se dedicará todo el día a dar entrevistas para enviar el mensaje de que ella ganó el debate en su estrategia por conquistar el voto de los indecisos.
Por la noche, a las 19 horas, encabezará un mitin en Lagos de Moreno, en la región de Los Altos, camino hacia Aguascalientes, donde el martes hará campaña.
La panista fue acompañada en el debate por 26 invitados especiales, entre ellos su esposo Sergio Ocampo, y sus tres hijas, así como Margarita Zavala, la consorte de Calderón y quien inclusive la acompañó ayer en el avión de la Ciudad de México a Guadalajara, en lo que fue el segundo vuelo comercial en la campaña.
La panista llegó a la capital jalisciense desde el viernes y el sábado y parte del domingo ensayó sus intervenciones con sus colaboradores.(apro)