"Televisa debe disculparse por imponer a Peña", The Guardian
“La evidencia acumulada sobre la manipulación de los medios de comunicación valida los sentimientos de miles de jóvenes universitarios que sienten que están siendo engañados por la televisión en votar por un candidato determinado. Televisa exigió a The Guardian una disculpa y escribir una carta. Muchos ciudadanos mexicanos piensan que es Televisa, que la que debe una disculpa a la sociedad mexicana”, se lee en el artículo “Televisa should apologise to Mexicans for its Peña Nieto election bias”, escrito por Luis Hernández Navarro.
El autor se refiere a la polémica causada cuando en fechas recientes el diario reveló que la campaña del candidato por la coalición PRI-PVEM compra espacios en medios de televisión, particularmente Televisa, para favorecerlo y beneficiarlo.
El artículo también señala la relación entre Televisa y el PRI destacando que en décadas atrás, el entonces presidente de la televisora, Emilio Azcárraga Milmo, se definió a sí mismo como “un soldado del PRI”.
El Diario resalta a Televisa como la compañía de medios en español más grande del mundo, controlando la audiencia de México en un 70 % y critica que la televisión pública es “casi inexistente”, además de no dejar a un lado la influencia que su competencia, TV Azteca, también ejerce sobre la sociedad.
“Tanto Televisa, como su rival TV Azteca, han asumido un papel eficaz en fabricar candidatos a cargos públicos, la definición de políticas públicas e incluso en asuntos como la seguridad pública y la movilización ciudadana. Día tras día las emisoras de radio y televisión no sólo informan, sino desinforman, amonestan o aclaman de acuerdo a lo que más les convenga en ese momento. Emiten opiniones, juzgan y condenan, muy a menudo como parte de un paquete de publicidad de pago presentado a la audiencia como mera información. Ellos actúan efectivamente como un gran elector, contratado por un patrocinador”, publica el autor.
“Tienen una serie de expertos en su nómina que aparecen en la pantalla dando su versión de la realidad y "legitiman" las opiniones de su empresa. También mantienen una estrecha relación con las empresas encuestadoras que producen resultados que, lejos de ser un instrumento válido para medir las tendencias electorales, están en la propaganda electoral de hecho”, advierte el escritor.
En el artículo se critica que el primer debate presidencial, realizado el 6 de mayo y en donde el candidato de las izquierdas, Andrés Manuel López Obrador, acusara a Peña Nieto se ser un producto y una imposición televisiva, no fuera transmitido en cadena nacional, y las dos televisoras también lo omitieran en sus dos canales con mayor audiencia, el 2 y el 13.
Según la publicación, estos sentimientos son compartidos por miles de jóvenes en todo México quienes lo han demostrado por medio de las recientes movilizaciones bajo el nombre de #YoSoy132 y a las que el diario llama la “Primavera Mexicana”, en las que han expresado su repudio al candidato priista y la inclinación de las televisoras, en especial Televisa, por favorecer al mismo. (Terra)