Estadounidenses votan a pesar del frío, el huracán y… las contracciones
Los Ángeles.- En Virginia, centenares de electores desafiaban el frío el martes para elegir al próximo presidente de Estados Unidos. Cerca de Nueva York, ignoraban los efectos del paso del huracán Sandy. Cerca de Chicago, una joven optó por votar con contracciones de parto.
Y millares de votantes repartían este martes a mitad de jornada y llevaban orgullosos la pegatina que anunciaba: "Yo voté para la elección presidencial 2012".
En la estación de bomberos y en la entrada del ayuntamiento de Alexandria (Virginia, este), transformados en centros electorales, todos los votantes coincidían con Kurt, un militar en uniforme: "Esta va a ser una elección muy ajustada".
En la estación de ladrillos rojos, voluntarios y policías municipales se dedicaban a ayudar a los votantes, que sufrieron un frío cruel mientras esperaban a la intemperie. "¡Las filas de votación sobre las flechas rojas! ¡Tomen sus boletas y caminen sobre las flechas rojas!", repetía Amanda, policía municipal, a cada elector que esperaba pacientemente su turno para llegar a la máquina de votar.
Mar de pancartas
En el exterior, decenas de pancartas plantadas sobre el césped hacen propaganda de las diversas candidaturas, a los cargos municipales o del Senado. "¡Todo el mundo está entusiasta, independientemente de a qué bando pertenezca!, asegura Caitrin McCarron, que milita por el Partido Republicano.
En el ayuntamiento de la ciudad, el rojo del cielo del amanecer se ha esfumado. Bernard McConnon, que posee su propia empresa, acaba de votar por el republicano Mitt Romney: "Lo que me preocupa es el gasto público descontrolado", dice.
Tristan Wright, de 36 años, consejero en un banco, acaba de "dar ocho años a Barack" Obama, señala, "aunque no lo haya hecho perfecto".
Hacia las 10AM, los militantes de uno y otro bando casi son más numerosos que los electores. Maurice Josh viste una camiseta con Obama-Biden. ¿Quién va a ganar? "Va a estar ajustado. Será... No, no sé nada, estará ajustado", afirma.
En Hoboken, en el estado de Nueva Jersey (noreste), duramente golpeado por el huracán Sandy hace una semana, las colas se extendían y las quejas también.
"Es inaceptable, estamos desde las 6AM", suelta cuando abren con 40 minutos de retraso su centro de votación Adora Agim, una ingeniera de 38 años oriunda de Nigeria, que se apresta a elegir a Obama y que insiste en la importancia de votar: "Yo vivía en un país donde sus votos no cuentan".
Reportan problemas
John Margolis, un banquero de 46 años que vota a Mitt Romney, descubrió que la máquina electrónica que debía utilizar no funciona, por lo que decide volver más tarde.
"Estoy 100% con Romney. O mejor dicho, lo estaba hasta la semana pasada", aclara. Pero quedó muy impresionado por la respuesta del gobierno de Obama a la tormenta Sandy.
En un centro electoral instalado en el auditorio de Miami-Dade, sur de Florida, otro estado clave, la inmensa mayoría de los cientos de votantes que hacían largas filas eran de origen cubano.
Aquellos que llegaron en la década de 1960 coincidían en votar por Romney "porque necesitamos alguien que sepa de negocios, que reactive esta economía", dijo a la AFP Ulises Calzadilla, jubilado de 75 años.
Pero quienes tienen menos de 15 años viviendo en Estados Unidos, son más abiertos a las propuestas demócratas, como Estrella del Sol, una cubana de 52 años que votaba por primera vez en su país de adopción.
"Siendo cubana es un privilegio aprovechar de este derecho que da la libertad", indicó. "Vine a votar por Obama porque creo que es el candidato que mantendrá y peleará por las medidas sociales que nos convienen a la mayoría, la educación, el medicare", dijo.
Trabajo de parto
Cerca de Chicago, en Dalton (Illinois, norte), nada habría podido impedir que Galicia Malone, de 21 años, ejerciera su voto, ni siquiera el nacimiento de su primer bebé.
La joven sintió sus primeras contracciones durante la noche, y se aceleraron en la madrugada. "Nunca he votado en mi vida", contó la mujer a la radio WBBM, "quería que mi hija se inspirara", agregó. Entrando al centro electoral, "yo solo pensé: 'Lee (la boleta) y respira, lee la boleta y respira...'".
"Esto va a estar ajustado, es importante estar aquí": Robert Burgess, 53 años, se mueve para luchar contra el frío como los otros 200 electores llegados a Alexandria, Virginia (este), desde las 06H00 de la mañana para elegir al próximo presidente estadounidense.
Sondeo de intención de voto de los hispanos en las elecciones en Estados Unidos
"Esto va a estar ajustado, es importante estar aquí": Robert Burgess, 53 años, se mueve para luchar contra el frío como los otros 200 electores llegados a Alexandria, Virginia (este), desde las 6AM de la mañana para elegir al próximo presidente estadounidense. (AFP)