Retratan en filme transición del Maquío empresario al político
Fotos Cortesía Gabriel Bauducco
El periodista argentino Gabriel Bauducco desnuda a través de una trilogía de documentales los sucesos de 1988. El realizador, quien actualmente trabaja como conductor del programa La pura verdad y reside en México desde 1998, se vale de los testimonios de los protagonistas de los hechos, analistas y familiares de los involucrados para reconstruir los hechos que marcaron el inicio de la era de la democratización en el país.
"El primer documental que hicimos fue el de Cuauhtémoc Cárdenas (Cárdenas: Oportunidad, poder, desolación). El segundo —Maquío, rebeldía, seducción y tragedia— se centra en Manuel J. Clouthier. Y habrá un tercero. Nos motiva echar luz sobre este proceso que explica en buena medida el México de hoy, es decir, una apertura partidaria que podrá gustarnos o no, pero no existía antes del 88", cuenta el director de ambas producciones en entrevista con La Razón.
Para Bauducco, 1988 fue un momento clave en la historia política y democrática del país "porque por primera vez se abren negociaciones en serio entre los partidos. Por un lado, acababa de salir Cuauhtémoc Cárdenas del PRI para un partido nuevo y compite contra ellos para la Presidencia de la República, con resultados nada malos para ser su primera elección. Por otro lado, avanza el partido Acción Nacional, que hasta ahora había tenido una presencia más bien testimonial dentro de los procesos electorales, pero no había conseguido un candidato que le permitiera competir seriamente por este cargo", explica.
Sin embargo, para el periodista la historia política mexicana no es lo más relevante. También toma importancia la incorporación de Maquío, un personaje que no tenía formación política en la contienda electoral.
"Clouthier no venía de la política, sino de la sociedad civil, del empresariado, y dice 'este país que tengo no me gusta, pero no puedo hacer más de donde estoy, la única forma aquí es entrarle a la política', y eso es lo que hace", cuenta Bauducco.
El director de Maquío, rebeldía, seducción y tragedia tardó seis meses en terminar la película, que, en una primera instancia, se basó en una investigación histórica. "Empezamos a buscar a los protagonistas. Realizamos 14 entrevistas para este documental, a pesar de que no todas están a cuadro. Fuimos reconstruyendo los hechos: hablamos con testigos, protagonistas, analistas", afirma.
Ricardo Alemán, quien actualmente trabaja como columnista, es una de las personas que hablan de Maquío en la cinta. El periodista cuenta, desde su experiencia de reportero destinado a la cobertura de su campaña electoral, cómo era la personalidad del líder panista.
"Viajaba en un camioncito de Maquío donde iba toda la prensa. Es la voz de alguien que lo veía feliz, cansado, de buen y de mal humor está en el documental. Así como la voz de Álvaro Delgado, autor de El Yunque, la ultraderecha en el poder", adelanta Bauducco, quien aclara que para este proyecto viajaron hasta Sinaloa, en donde tuvo la oportunidad de conversar con los hijos de Maquío.
"Lo que me ha dado todos estos años de trabajar en las entrevistas es la sensibilidad para hablar con personajes muy disímiles y enfrentarte a ellos de diferentes maneras. Cuando te sientas con Luis Felipe Bravo Mena, quien le escribía los discursos a Maquío, conversas desde la perspectiva profesional con él, lo mismo cuando hablas con su jefe de campaña; pero cuando te sientas con su hija menor y tienes que hablar con ella y sobre cartas que aparecen en una caja fuerte después de muerto, en las que él les habla sobre la posibilidad de su muerte, evidentemente el tono es otro", concluye.
Maquío, rebeldía, seducción y tragedia se puede ver desde hoy en la página de Azteca Opinión. Posteriormente Bauducco espera exhibir el filme en las salas de cine del país y llevarlo por circuitos de festivales.
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