Canadá se disculpa por rechazar a judíos que huían de los nazis
El primer ministro canadiense Justin Trudeau se disculpó formalmente ayer a nombre de su nación por el rechazo de un barco lleno de judíos que escapaban de la Alemania nazi en 1939.
El barco alemán MS St. Louis transportaba a 907 judíos que huían de la persecución nazi y que también había sido rechazado por Cuba y EU. Los pasajeros se vieron forzados a regresar a Europa y más de 250 de ellos posteriormente murieron en el Holocausto. Trudeau dijo que la disculpa debió hacerse hace mucho tiempo.
Hitler "observaba mientras nosotros rechazábamos sus visas, ignorábamos sus cartas y les negábamos la entrada", dijo ante el Parlamento.
"Hay poca duda de que nuestro silencio permitió que los nazis lograran su cometido, la 'solución final' al llamado problema judío".
Agregó que en ese entonces los legisladores utilizaron a las leyes canadienses para encubrir su antisemitismo. "Permitimos que el antisemitismo tomara lugar en nuestras comunidades y se volviera nuestra política oficial", dijo Trudeau. "Por albergar tal odio e indiferencia hacia los refugiados había que compartir la responsabilidad moral por sus muertes".
Antes de la Segunda Guerra Mundial y el subsecuente Holocausto, el gobierno seguía sentimientos antisemitas y restringió severamente la inmigración de judíos al país. Entre 1933 y 1945, solamente se aceptó a 5,000 refugiados judíos.
El barco llegó a Canadá más de seis meses después de que los nazis en Alemania atacaron casas judías, quemaron 250 sinagogas y mataron al menos a 91 personas, un suceso conocido como "Kristallnacht" o la Noche de los Cristales Rotos.
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