El talco puede llegar a ser cancerígeno, según informe de la OMS
En una evaluación de riesgos, la Agencia para la Investigación del Cáncer de la Organización Mundial de la Salud (OMS) ha catalogado al talco y al acrilonitrilo como posibles agentes cancerígenos para los seres humanos. Esta clasificación, publicada en la revista The Lancet Oncology, ha generado un renovado interés en los riesgos asociados con estas sustancias en diversos contextos.
El talco, mineral natural utilizado ampliamente en cosméticos y polvos corporales, ha sido vinculado con un incremento en el riesgo de cáncer de ovario, especialmente en casos de exposiciones prolongadas en entornos laborales. Aunque se ha enfocado en talco libre de amianto, persiste la preocupación sobre posibles contaminaciones con este carcinógeno, las cuales podrían haber contribuido a ciertos casos de cáncer.
Demandas recientes y evidencia científica
El farmacéutico Johnson & Johnson ha enfrentado acusaciones legales en Estados Unidos relacionadas con sus productos de talco. Sin embargo, un análisis exhaustivo realizado en 2020 no encontró evidencia concluyente de un vínculo directo entre el uso de talco en áreas genitales y el cáncer de ovario, aunque las investigaciones continúan.
Por otro lado, el acrilonitrilo, utilizado en la fabricación de polímeros presentes en textiles y plásticos de consumo, ha sido clasificado como “cancerígeno”. Se han encontrado pruebas de cáncer de pulmón y evidencia limitada de cáncer de vejiga en humanos. La presencia de acrilonitrilo en el humo del cigarro y la contaminación del aire agravan las preocupaciones sobre sus efectos en la salud pública.
Implicaciones para la salud pública
Este análisis de la OMS refuerza la necesidad de políticas regulatorias robustas y continuas evaluaciones de seguridad, con el objetivo de mitigar los riesgos potenciales que estas sustancias pueden representar para la salud humana en diferentes contextos y escenarios.
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